Postre RICO, FÁCIL y BARATO, en 5 MINUTOS y ¡ SIN HORNO !🤤 Una receta clásica que triunfa!
Me encanta disfrutar y a veces no tengo tiempo. Así que para esto preparo un postre cremoso y delicioso se hace bien rápido y fácil. Una receta de toda la vida que siempre triunfa.
Ingredientes:
- 100 ml de leche (1/2 taza).
- 600 ml más de leche (3 tazas).
- 30 gr de maicena, almidón o fécula de maíz (2 cucharadas).
- 3 yemas de huevo.
- 60 gr de azúcar (4 cucharadas).
- 10 ml de esencia, extracto o aroma de vainilla (1 cucharada).
- 2 ramas de canela.
- 100 gr de galletas (1/2 paquete).
- 200 gr de chocolate (1 tableta).
- 200 ml de nata, crema de leche, crema para batir o para montar (1 taza).
- 25 gr de mantequilla (1 cucharada).
Receta paso a paso:
- En una cacerola mediana, mezcle 600 ml de leche con 2 ramas de canela y lleve a cabo una ebullición a fuego medio. Retirar del fuego y dejar enfriar.
- En un daño mediano, mezcle 30 gr de maicena, almidón o fécula de maíz con 100 ml de leche hasta formar una pasta homogénea. Añadir las yemas de huevo y 60 gr de azúcar y mezclar bien.
- Incorporar la mezcla anterior a la leche con canela y volver a llevar a ebullición, revolviendo constantemente, hasta que espese. Retirar del fuego y añadir 10 ml de esencia, extracto o aroma de vainilla. Dejar enfriar.
- Mientras tanto, triturar 100 gr de galletas hasta formar migas. Mezclar con 25 gr de mantequilla derretida hasta formar una masa homogénea.
- En una fuente para hornear, coloque la mezcla de galletas y presione para formar una capa uniforme en el fondo. Verter la mezcla de leche y huevo encima y llevar al refrigerador durante al menos 2 horas.
- Derretir 200 gr de chocolate y mezclar con 200 ml de nata, crema de leche, crema para batir o para montar. Verter encima del postre y llevar de nuevo al refrigerador durante al menos 2 horas más antes de servir.
Aquí está mi versión en vídeo con todos mis trucos y secretos:
Postre RICO, FÁCIL y BARATO, en 5 MINUTOS y ¡ SIN HORNO !🤤 Una receta clásica que triunfa!, recetas elaboradas por Pelayo Fernández.