Carlota de café: Un postre frío sin horno perfecto para cualquier ocasión
La carlota de café es un postre delicioso y fácil de preparar que no requiere horno. Es una opción ideal para quienes buscan un postre refrescante y con un sabor intenso a café.
En este artículo te presentamos una receta de carlota de café que te sorprenderá por su simpleza y sabor. Con solo unos pocos ingredientes y pasos sencillos, podrás preparar este postre en casa sin necesidad de encender el horno.
Ingredientes:
- 10 gr de Gelatina en polvo o grenetina (1 cucharada)
- 200 ml de Nata, crema de leche, crema para batir o montar o doble crema (1 taza)
- 200 ml de Leche (1 taza)
- 200 ml de Queso crema o de untar (1 taza)
- 400 ml de Leche condensada (2 tazas)
- 2 Paquetes de Galletas (200gr)
- 150 ml de Café (3/4 de taza)
- 50 gr de Mantequilla derretida (1/4 de taza)
- Papel film
- Opcional: Cacao en polvo, virutas de chocolate, nueces picadas, etc. para decorar
Preparación:
- Prepara el café: Calienta el agua y agrega el café soluble o utiliza café ya preparado. Déjalo enfriar a temperatura ambiente.
- Tritura las galletas: Puedes hacerlo en una licuadora o con un mortero hasta obtener una textura fina similar a la arena.
- Mezcla las galletas trituradas con la mantequilla derretida: Revuelve bien hasta que la mantequilla se haya integrado completamente y la mezcla tenga una textura homogénea.
- Forra un molde desmontable con papel film: Cubre el fondo y las paredes del molde con el papel film para facilitar el desmoldado de la carlota.
- Presiona la masa de galletas en el fondo del molde: Extiende la masa de galletas uniformemente por el fondo del molde y presiona bien para que quede compacta.
- Disuelve la gelatina: En un recipiente pequeño, coloca la gelatina en polvo y agrega un poco de agua caliente (aproximadamente 50 ml). Remueve hasta que la gelatina se haya disuelto completamente.
- Bate la nata: En un bol aparte, utiliza una batidora eléctrica o manual para batir la nata hasta que esté firme y tenga picos. Reserva.
- Mezcla la leche condensada, el queso crema y la leche: En otro bol, mezcla estos ingredientes hasta obtener una crema homogénea.
- Incorpora la gelatina disuelta a la mezcla de leche condensada y queso crema: Agrega la gelatina disuelta a la crema y mezcla bien para que se integre completamente.
- Agrega la nata montada a la mezcla anterior: Con movimientos envolventes, incorpora la nata montada a la crema de leche condensada y gelatina hasta obtener una mezcla homogénea y esponjosa.
- Vierte la mitad de la mezcla sobre la base de galletas: Cubre la base de galletas con la mitad de la crema que preparaste en el paso anterior.
- Cubre con el café: Vierte el café frío sobre la crema, asegurándote de que cubra toda la superficie.
- Vierte el resto de la mezcla sobre el café: Cubre la capa de café con la mitad de la crema restante.
- Refrigera la carlota: Tapa el molde con papel film o aluminio y refrigera durante al menos 4 horas o hasta que la carlota esté firme. Lo ideal es dejarla reposar durante toda la noche.
- Desmolda la carlota: Retira el molde desmontable con cuidado y desmolda la carlota sobre un plato o bandeja. Puedes ayudarte del papel film para despegarla del molde.
- Decora la carlota: Puedes espolvorear la carlota con cacao en polvo, decorar con virutas de chocolate, nueces picadas, o con la decoración de tu preferencia.
Consejos:
- Puedes utilizar café soluble o café ya preparado para esta receta. Si usas café soluble, asegúrate de que esté completamente disuelto antes de agregarlo a la mezcla.
- Si la nata no está bien fría, será más difícil batirla hasta que esté firme. Puedes colocarla en el refrigerador durante unos minutos antes de batirla.
- Para obtener una textura más cremosa, puedes batir la leche condensada con el queso crema antes de agregar la gelatina.
